La eterna rivalidad entre suegras y nueras debe terminar.
Emma E. Sánchez
Cuando se habla de problemas en los matrimonios, con frecuencia la figura de la suegra malvada sale a relucir. Es del dominio público hacer chistes, bromas y serias críticas de las suegras en general, donde se pone de relieve su mala influencia en el matrimonio. Pero como todas las monedas, la historia tiene dos caras y este artículo te va a hablar un poco a ti, nuera, de las cosas que debes saber y tener muy presente antes de hablar mal o emitir un juicio sobre su suegra. ¿Estás lista?
1. Tu suegra es una mujer como tú y un día llegarás a ser como ella
La madre de tu esposo es una mujer igual que tú, con la única diferencia que ella ya recorrió el camino que tú recién inicias. Ella ya formó una familia, “chueca o derecha” ya lo hizo, y lo hizo tan bien, que tú elegiste a uno de sus hijos como tu pareja de vida. Entonces, ella tiene mucha experiencia que ofrecerte porque —no lo olvides—, tú un día estarás en su lugar. Serás la suegra de alguien y no te va a gustar ser juzgada o criticada con severidad.
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2. A ella la mueve el amor, aunque a veces parezca lo contrario
Para algunas madres es muy difícil separase de sus hijos, concederles libertad o hacerse a la idea que su pequeño ya creció y ahora prefiera a otra mujer. Eso es difícil. Esa mujer, va a amar a tus hijos con locura, los va a adorar y a veces su amor la cegará. Tal vez se enoje contigo o cuestione tus formas y métodos de educar a tus hijos, de organizar tu hogar y la relación con tu esposo, pero sé paciente. Conforme ella vea tu dedicación, tus esfuerzos sinceros y el buen fruto que vas a dar, ella irá aprendiendo. Sé paciente, tolerante y honesta con ella, tu suegra ama a tu familia y desea aprender a amarte también.
3. Ella no es tu enemiga
La mayoría de las suegras, de entrada, quieren tener una buena relación con sus nueras. Así que haz tu parte: dale una y otra oportunidad, de ser necesario. Quita de tu mente ideas, suposiciones y evita los malos entendidos. Ella no está en tu contra, inicia bien la relación con un ánimo positivo y si ya tienes una relación con algunos choques, invítala a salir y hablen sinceramente. Exprésate con claridad y dile cómo te sientes, sin reclamos pero sí con el ánimo de tener una buena relación con ella.
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4. Tu suegra es muy importante para tu esposo y tus hijos
No los prives de su amor, no los separes, no intrigues en contra suya, de hacerlo, solo lastimarás a los que tú más amas, romperás corazones y separarás familias. Quita de tu mente la idea de competir con ella por el amor de tu esposo o tus hijos; son amores muy diferentes, no hay punto de comparación. Al contrario, fomenta las buenas relaciones, anima a tus hijos a llamarle o visitarla.
5. Tu suegra también está aprendiendo
Por eso, no supongas nada, háblalo con claridad, compartan, dialoguen, hagan cosas juntas, organicen actividades que fortalezcan a la familia, no que la separen. Tú no lo sabes y ella solo sabe un poquito más que tú, así están juntas en la gran aventura de construir y fortalecer a la misma familia.
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6. Ella puede ser tu mejor juez o tu mejor aliada, ¿qué prefieres?
Un consejo sabio: Pide su apoyo, su opinión, pide que te dé su punto de vista en algunas cosas; ella se sentirá tomada en cuenta y necesaria. Ama a su hijo, trátalo bien y cuídalo, ¿qué madre puede enojarse con alguien que ama a su hijo? Esfuérzate y ella será tu mejor defensora, tu amiga más leal y fiel. Así que el día que tengas un problema o una necesidad, tu suegra junto a tu madre serán las primeras en correr a ayudarte.
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7. Si eres inteligente, fomentarás que tu esposo la busque y la procure
Creo que ese es uno de los más grandes secretos para que una suegra llegue a amar a su nuera: que ella no aleje a su hijo, al contrario, que fortalezca el amor y la buena relación que ellos tienen. Y tú cuida y fortalece también la relación con tu propia madre.
8. Ella puede llegar a amarte muchísimo
Tengo la gran fortuna de tener una suegra maravillosa, ella ha sido una segunda madre para mí, una de mis mejores amigas y un gran ejemplo de cómo debo ser ahora que yo también soy una suegra. Esa mujer, la madre de tu esposo, puede ser tu gran aliada. Una vez que ella vea la maravillosa mujer que eres, habrás ganado su corazón para siempre.
9. Sé la primera en mostrar buena voluntad y respeto
A veces, desafortunadamente, la buena relación simplemente no se da. Y si después de esforzarte sinceramente y hacer tu parte la relación con tu suegra no funciona, conviértete en la mujer más respetuosa de este mundo. Nunca hables mal de ella a tu esposo, tus hijos o cualquier persona de este universo. Haz cosas buenas por ella de manera abnegada y discreta; créeme, el tiempo pone todo en su lugar.
Toda relación humana vale mucho cualquier esfuerzo, pero la relación nuera–suegra lo vale a un mucho más, porque es el vínculo que une, fortalece y ensancha generaciones.
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Emma E. Sánchez
Pedagoga y Terapista familiar y de pareja. Casada y madre de tres hijas adultas. Enamorada de la Educación y la Literatura. Escribir sobre los temas familiares para ayudar a otros es mi mejor experiencia de vida.
